El dolor lumbar es muy común en nuestra sociedad, mucha gente la sufre en silencio y toma muchas medicinas sin saber que se puede tratar de forma más natural mediante fisioterapia y osteopatía. Hay bastantes pacientes de Oreka que tienen este problema y en este artículo queremos ayudar a comprenderlo un poco más.
Hablaremos sobre las personas más afectadas por el dolor lumbar, las causas y el efecto de las ciáticas, los tipos de lumbalgia y los tratamientos y opciones que recomendamos para curarlas mientras disminuimos el dolor que nos provoca.
Personas más afectadas por el dolor lumbar
Según un estudio del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, el dolor lumbar es una patología muy frecuente que aqueja a uno de cada cinco españoles. Puede afectar a personas de cualquier edad, aunque se da con más frecuencia entre los 40 y los 60 años.
Hay personas que por su actividad laboral corren el riesgo de sufrir dolor lumbar, todas aquellas que trabajan levantando peso. En este sentido, es importante mantener una buena postura realizando el trabajo para aminorar el riesgo a sufrir lumbalgia o a reducir los síntomas.
Las personas con sobrepeso tienen más propensión a sufrirla y también las embarazadas, ya que la parte lumbar ayuda a soportar los kilos de más de la barriga.
Causas del dolor lumbar
En general, distinguimos dos tipos de lumbalgia diferentes que se diagnostican en función del origen, la duración y la intensidad del dolor.
Lumbalgia inflamatoria
La lumbalgia inflamatoria puede estar causada por enfermedades degenerativas como la artrosis, el estrechamiento del agujero foraminal o la estenosis del canal lumbar, por infecciones vertebrales, por dolores irradiados relacionados con el cáncer o por la osteoporosis. Nuestros especialistas en fisioterapia y osteopatía pueden ayudarte a identificar de dónde proviene el dolor y derivarte a otros médicos que actuarán sobre la raíz del problema. Sin embargo, se ha demostrado que los tratamientos basados en osteopatía y fisioterapia del dolor lumbar inflamatorio son eficaces para reducir el dolor en muchos casos.
Lumbalgia mecánica
El origen del dolor lumbar mecánico lo encontramos en la postura o por sobresfuerzos. El dolor puede proceder de la columna vertebral por problemas discales, por anomalías congénitas de la zona lumbar, por traumatismos causados por la dislocación o fracturas vertebrales o distensiones de la espalda o por problemas mecánicos en la columna vertebral. Hay veces que el dolor lumbar está ocasionado por una ciática. La ciática lumbar es cuando la lumbalgia se relaciona directamente con una afectación de la raíz nerviosa, normalmente debido a la presencia de una hernia discal.
En estos casos la fisioterapia y la osteopatía te pueden ayudar muchísimo a mejorar tu calidad de vida. Algunas veces el dolor puede cronificarse y tratamientos como los que ofrecemos en el centro Oreka de Mataró te ayudarán significativamente a mejorar tu calidad de vida.
Consejos de Oreka para reducir el dolor lumbar
En Oreka centro de fisioterapia y osteopatía de Mataró, os proponemos varias maneras de tratar el dolor lumbar con o sin ciática, agudo o cronificado.
Osteopatía y fisioterapia
Se ha demostrado médicamente que los tratamientos de fisioterapia son muy efectivos en cualquier tipo de dolor lumbar, al igual que el tratamiento mediante osteopatía. La actuación sobre la zona afectada e irradiada reduce considerablemente el dolor y con una buena pauta de acción podemos llegar a eliminar de forma permanente el molesto dolor lumbar.
Consúltanos para más información al respecto en nuestro centro de Mataró.
Ejercicio físico moderado
Es recomendable alternar el descanso con pequeñas dosis de ejercicio. En este sentido, en Oreka podemos ayudarte organizando tus visitas con nuestros fisioterapeutas y nuestros preparadores físicos para una recuperación completa.
Medicación
Para empezar, nunca debemos automedicarnos. Si queréis apelar a esta opción debéis consultar con vuestro médico de cabecera o profesional médico. La toma de analgésicos, antinflamatorios y relajantes musculares pueden ayudar a sofocar el dolor, pero no deja de ser un parche al problema. Algunas cremas también pueden ayudarnos.