El esguince es una de las lesiones más comunes que podemos sufrir en nuestro día a día. Y, si bien, el tratamiento no es complejo si que puede comportar complicaciones a largo plazo sino se cura de forma correcta. Por suerte existen tratamientos de fisioterapia, osteopatía y rehabilitación que pueden tratar el esguince.

Un esguince se produce cuando hay un estiramiento desproporcionado o un desgarro de ligamentos. Los ligamentos son los tejidos que unen las articulaciones.

A veces puede surgir dudas sobre si se tiene un esguince o una distensión. La distensión es la lesión del músculo y el esguince la de la articulación. En cualquier caso, desde Oreka recomendamos acudir al hospital siempre que se tengan los síntomas de un esguince para descartar complicaciones y tener un tratamiento adecuado. En el hospital te realizarán pruebas para comprobar el grado del esguince y de descarte de roturas.

 

Tipos de esguince

Existen diferentes tipos de esguince que difieren unos de otros dependiendo de la gravedad de este:

  • Esguince de primer grado: existe una distensión de la articulación, pero no llega a romperse.
  • Esguince de segundo grado: se trata de una rotura parcial del tejido de los ligamentos.
  • Esguince de tercer grado: rotura completa de la porción ligamentosa.

Síntomas

Los síntomas son parecidos en esguinces de cualquier grado, la diferencia principal es que los efectos serán más o menos agudos dependiendo de la gravedad de la lesión. Algunos síntomas son:

  • Dolor constante o dolor al palpar la zona.
  • Hinchazón.
  • Movimiento limitado de la zona afectada.
  • Inestabilidad en la parte del cuerpo afectada.
  • En el momento de la lesión podemos escuchar un chasquido.

Causas y prevenciones

Las causas están relacionadas con la extensión desproporcionada de un ligamento que acaba produciendo daño y desgarros en el mismo. La mayoría de los esguinces se producen en cuatro partes del cuerpo: rodillas, pulgares, muñecas y tobillos. Las circunstancias que pueden propiciar un esguince pueden ser:

  • Rodillas: El esguince de rodillas se produce por el giro brusco y accidentado durante una actividad deportiva.
  • Pulgares: El esguince de pulgares se produce mucho en deportes con raqueta como el tenis y por caídas.
  • Muñecas: El esguince de muñecas se da mayoritariamente por caídas y el movimiento involuntario que hace el cuerpo para amortiguar el impacto.
  • Tobillos: Los esguinces de tobillos son muy comunes. Puede pasar mientras caminamos y pisar mal en una superficie y que el peso de nuestro cuerpo provoque la lesión o durante la práctica deportiva.

Para prevenir un esguince es importante estar fortalecido físicamente, es decir, realizar un acondicionamiento físico antes de una práctica deportiva a la que no estamos acostumbrados. Cuando estamos cansados los músculos sostienen de menos efectiva y puede propiciar el esguince. Como factores externos debemos tener en cuenta ir con cuidado en superficies desniveladas o resbaladizas y hacer deporte con el equipo adecuado.

 

Tratamiento de esguinces en Oreka Mataró

En Oreka de Mataró podemos tratar tu esguince mediante fisioterapia, osteopatía y rehabilitación activa. Sin embargo, tenemos que tener en cuenta que podemos actuar directamente en los casos en el que el esguince sea de primero o segundo grado, ya que los esguinces de tercer grado requieren de una intervención quirúrgica. Una vez que se haya realizado la operación en el esguince de tercer grado Oreka puede ayudar en tu recuperación.

Si tienes un esguince y quieres acelerar el proceso de curación y reducir el dolor, cuenta con la Clínica Oreka de osteopatía y fisioterapia. Estudiaremos tu caso y te ofreceremos la mejor solución para tu problema.