Se puede recuperar el ligamento cruzado anterior sin cirugía mediante rehabilitación y ejercicio físico. Es muy importante mentalizarse de que el esfuerzo para una recuperación completa va a pasar por horas de entrenamiento, sin embargo, no someterse a técnicas invasivas y la posibilidad de recuperar una vida deportiva como la anterior a la lesión son un gran revulsivo para hacerlo de este modo.
En el Centro de Fisioterapia y Osteopatía Oreka de Mataró estamos especializados en la recuperación de lesiones deportivas y podemos crear una pauta para la rehabilitación integral de la rotura del ligamento cruzado anterior.
¿En qué consiste la rotura del ligamento cruzado anterior?
Para definir como se produce la rotura del ligamento cruzado anterior primero debemos saber qué es. Los ligamentos cruzados se encuentran en el interior de la articulación de la rodilla y se cruzan los unos con los otros formando una “X”.
Cuando se lesiona el ligamento cruzado anterior suelen resentirse otras partes de alrededor como el menisco, el cartílago articular y otros ligamentos. La denominación es de esguinces y ocurren en diferentes grados:
- Esguince del ligamento cruzado anterior de grado 1: El mantenimiento de la rodilla es estable, pero se ha producido un estiramiento que causa un dolor leve.
- Esguince de ligamento cruzado anterior de grado 2: Se produce un desgarro parcial del ligamento.
- Esguince de ligamento cruzado anterior de grado 3: División del ligamento en dos mitades. Incapacidad de sostener la rodilla en una posición estable. Desgarro completo del ligamento.
Causas
Las causas de lesiones en el ligamento cruzado anterior suelen estar relacionadas con la práctica deportiva. Puede ocurrir de diversas maneras:
- Detención súbita tras correr a gran velocidad.
- Cambios rápidos de dirección.
- Por contacto directo o colisión.
- Aterrizaje incorrecto tras un salto.
- Desaceleración mientras se corre a gran velocidad.
Síntomas
El primer síntoma que siente la persona con una lesión del ligamento cruzado anterior se produce cuando pasa. Puede notarse un crujido y que la rodilla cede para dejarlo sin apoyo. Otros síntomas asociados son:
- Inflamación y dolor.
- Dolor a la presión en la línea articular.
- Incomodidad al caminar.
- Pérdida de movimiento.
- Inestabilidad articular.
La cirugía del ligamento cruzado anterior es la versión rápida
La cirugía ha sido el método por excelencia para tratar la rotura del ligamento cruzado anterior. Sin embargo, cada vez más estudios cercioran que puede realizarse la curación sin métodos tan invasivos; usando la fisioterapia, la rehabilitación activa y el ejercicio personalizado.
La realidad es que las personas que se someten a una intervención quirúrgica del ligamento cruzado anterior siguen experimentando dolor si no se realiza rehabilitación y fisioterapia de forma temprana y continuada a lo largo del tiempo.
Hay muchos ejemplos de deportistas profesionales de la Premiere League de fútbol y de la NBA que se han recuperado de una lesión del ligamento cruzado anterior sin cirugía y han podido seguir con su rutina deportiva e incluso seguir ganando premios y galardones. Como DeJuan Blair de los San Antonio Spurs.
Proceso de rehabilitación del ligamento cruzado anterior sin cirugía
En Oreka realizamos el acompañamiento en la rehabilitación del ligamento cruzado anterior sin cirugía; un tratamiento centrado en la rehabilitación activa y la fisioterapia. Para ello el paciente debe estar convencido de que es seguro recuperarse de esta manera y comenzar con la rehabilitación lo más rápidamente posible.
De hecho, el procedimiento de rehabilitación con y sin cirugía para la rotura del ligamento cruzado anterior es muy similar, excepto en que los plazos de recuperación son más rápidos sin cirugía ya que no se precisa realizar un seguimiento médico de la operación.
En primer lugar, desde Oreka reduciremos el dolor aplicando técnicas de fisioterapia y osteopatía e incorporando ejercicios sencillos de rehabilitación que no incluyan un rendimiento excesivo de la zona afectada.
Después procuramos trabajar la fuerza muscular, la función y el movimiento mediante la rehabilitación activa, teniendo siempre en cuenta el umbral de dolor del paciente y la evolución de la rotura.
La etapa final consiste en el retorno paulatino a la rutina deportiva del paciente con rotura del ligamento cruzado anterior. El ejercicio personalizado pautado y la fisioterapia serán claves para conseguir aceleración, agilidad, coordinación equilibrio y resistencia.
Lo más importante de este tratamiento es tener en cuenta que la rehabilitación y el ejercicio físico van a ser la piedra angular de la rehabilitación integral. Por lo tanto, el paciente debe estar motivado y ser consciente que es una recuperación a 1 año vista tras sufrir la rotura para estar al 100%.